Trastornos por consumo de sustancias: Historias de éxito de Head Start
La historia de Ari
La historia de Ari
Ari: Soy Ariel. Me llaman Ari. Soy alguien que se está recuperando de la adicción a las drogas y también soy mamá. [Bebé llorando]
Jen Merwin: Mi nombre es Jen Merwin y soy una visitadora del hogar de Early Head Start.
[Bebé haciendo gorgoritos]
Ari volvió a casa de un centro de residentes sobrios, las cosas parecían ir en la dirección correcta y todo parecía estar bien. Me sorprendí en la visita que tuve con ella cuando vi las agujas que le salían de la sudadera.
Ari: Podía estar en camino a recoger a mi hijo y de repente podía doblar a la izquierda para buscar drogas, y no había nada que pudiera detenerme. Todo lo que recuerdo es que me dijeron: “No puedes quedarte con tu hijo así”.
Jen: Ari se fue a recibir tratamiento. Creo que muchas personas no se dan cuenta de que, cuando alguien está en recuperación, es común que tenga una recaída. No la juzgué, ella sabía que no la juzgaba, y eso le permitió ser abierta conmigo con respecto a su adicción, yo estaba allí para apoyarla en todo lo que pudiera.
Ari: Todo el tiempo que estuve con el tratamiento, Jen verificaba para asegurarse de que estaba bien. Entonces, me afirma que como yo estoy bien, él está bien y vamos a estar bien. Eso me ayuda porque pienso ¡guau!, un profesional me dice que tengo mucha fortaleza y coraje y no escucho eso con frecuencia. Y yo tomo eso y digo, bueno, les voy a demostrar que puedo comportarme como una madre.
Y ellos me dicen: Lo vemos, estás haciendo lo que debes hacer y te devolveremos a tu hijo. Eso es muy importante. [Bebé haciendo gorgoritos]
Solo puedo imaginar el dolor por el que he hecho pasar a las personas, pero Dios mío, estoy feliz de que hayan estado a mi lado porque si no lo hubieran hecho, yo no estaría aquí.
Jen: Uno es una pieza del rompecabezas de su vida y sí, es maravilloso.
Este video comparte la historia de Ari, una madre de Early Head Start, y su proceso de recuperación del uso de sustancias. Con el apoyo de Jen, su visitadora de Early Head Start, Ari persevera en su recuperación. Ari y Jen describen con honestidad el papel de la visita al hogar de Early Head Start en el apoyo a Ari para abordar los desafíos relacionados con la adicción y la crianza. Explore maneras de compartir este video con las familias afectadas por los trastornos de consumo de opiáceos y otras sustancias para ayudarlos a tomar conciencia del impacto del programa Head Start.
La historia de Ari
Ari: Soy Ariel. Me llaman Ari. Soy alguien que se está recuperando de la adicción a las drogas y también soy mamá. [Bebé llorando]
Jen Merwin: Mi nombre es Jen Merwin y soy una visitadora del hogar de Early Head Start.
[Bebé haciendo gorgoritos]
Ari volvió a casa de un centro de residentes sobrios, las cosas parecían ir en la dirección correcta y todo parecía estar bien. Me sorprendí en la visita que tuve con ella cuando vi las agujas que le salían de la sudadera.
Ari: Podía estar en camino a recoger a mi hijo y de repente podía doblar a la izquierda para buscar drogas, y no había nada que pudiera detenerme. Todo lo que recuerdo es que me dijeron: “No puedes quedarte con tu hijo así”.
Jen: Ari se fue a recibir tratamiento. Creo que muchas personas no se dan cuenta de que, cuando alguien está en recuperación, es común que tenga una recaída. No la juzgué, ella sabía que no la juzgaba, y eso le permitió ser abierta conmigo con respecto a su adicción, yo estaba allí para apoyarla en todo lo que pudiera.
Ari: Todo el tiempo que estuve con el tratamiento, Jen verificaba para asegurarse de que estaba bien. Entonces, me afirma que como yo estoy bien, él está bien y vamos a estar bien. Eso me ayuda porque pienso ¡guau!, un profesional me dice que tengo mucha fortaleza y coraje y no escucho eso con frecuencia. Y yo tomo eso y digo, bueno, les voy a demostrar que puedo comportarme como una madre.
Y ellos me dicen: Lo vemos, estás haciendo lo que debes hacer y te devolveremos a tu hijo. Eso es muy importante. [Bebé haciendo gorgoritos]
Solo puedo imaginar el dolor por el que he hecho pasar a las personas, pero Dios mío, estoy feliz de que hayan estado a mi lado porque si no lo hubieran hecho, yo no estaría aquí.
Jen: Uno es una pieza del rompecabezas de su vida y sí, es maravilloso.
La historia de Gina
La historia de Gina
Gina: Crecí en una casa en la que siempre hubo adicción a las drogas y al alcohol. Las cosas del pasado a veces le pasan factura a uno. Comencé a usar drogas a los 26 años. Durante este tiempo, estuve presa durante dos años seguidos. Hasta me perdí el segundo cumpleaños de mi hijo.
Un día, estando en la cárcel, mi asistente social me llamó a su oficina y me dijo que tenía un mensaje de la guardería de mi hijo. Que algunos miembros querían venir a visitarme y tratar de llevar a mi hijo también. Yo me quedé sorprendida. En ese momento me di cuenta de que aún había personas en este mundo que no solo se preocupaban por mí, la adicta hecha un desastre, sino por el bienestar de mi hijo y mi familia. Venía del corazón, como lo sentí.
Volví de la cárcel y fui directamente a la guardería a agradecerles a todos esos miembros del personal. Esas mujeres creyeron en mí y vieron más en mí cada día. Me dieron folletos para vacantes de empleo y me llevaban a las citas para guiarme en un camino positivo y estable en mi vida. Y entonces, la meta es ser una mejor mamá, una mejor persona. Y estoy sobria. [Risas] ¿Se imagina? [Risas] Así es.
Gina comparte la larga historia de adicción de su familia a las drogas y otras sustancias. También explica cómo el programa Head Start de su hijo se puso en contacto con ella en prisión para ayudarla a recuperarse. Gina recibió orientación positiva y fue capaz de reanudar su vida, libre de adicción, después de que fuera liberada de prisión. Este video se centra en el camino hacia la recuperación y en cómo el programa Head Start ayudó a Gina.
La historia de Gina
Gina: Crecí en una casa en la que siempre hubo adicción a las drogas y al alcohol. Las cosas del pasado a veces le pasan factura a uno. Comencé a usar drogas a los 26 años. Durante este tiempo, estuve presa durante dos años seguidos. Hasta me perdí el segundo cumpleaños de mi hijo.
Un día, estando en la cárcel, mi asistente social me llamó a su oficina y me dijo que tenía un mensaje de la guardería de mi hijo. Que algunos miembros querían venir a visitarme y tratar de llevar a mi hijo también. Yo me quedé sorprendida. En ese momento me di cuenta de que aún había personas en este mundo que no solo se preocupaban por mí, la adicta hecha un desastre, sino por el bienestar de mi hijo y mi familia. Venía del corazón, como lo sentí.
Volví de la cárcel y fui directamente a la guardería a agradecerles a todos esos miembros del personal. Esas mujeres creyeron en mí y vieron más en mí cada día. Me dieron folletos para vacantes de empleo y me llevaban a las citas para guiarme en un camino positivo y estable en mi vida. Y entonces, la meta es ser una mejor mamá, una mejor persona. Y estoy sobria. [Risas] ¿Se imagina? [Risas] Así es.
La historia de Delia
La historia de Delia
Delia Ramírez: Mi nombre es Delia Ramírez y soy una abuela que cría a sus nietos. [Bebé haciendo gorgoritos] Me vi en mi casa con dos bebés, las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y con problemas.
[Bebé haciendo gorgoritos]
El más grande tenía terribles rabietas y situaciones, y era muy difícil. Me sentía, digamos que, derrotada. No sabía a quién acudir. Recordé Head Start, sin saber lo fabuloso que era el programa. Nunca me imaginé que se iban a ocupar de las niñas, que les iban a enseñar y ayudar a la familia en general. Me dieron la oportunidad de tomar cursos universitarios. Me dieron la oportunidad de contar mi historia, de poder ayudar a otras personas. Me llevaron a Washington para hablar con senadores y congresistas. ¡A mí!
[Risas]
Me siento empoderada ahora, como abuela, como madre y como persona que está atravesando esta crisis de opiáceos. Me siento confiada en que mis nietos serán buenos, por el solo hecho de haber asistido a Head Start.
Delia habla de su proceso de convertirse en abuela y criar a dos nietos como resultado de la adicción de su hijo. Delia buscó ayuda de un programa Head Start que le brindó oportunidades de aprender acerca de la crianza y le ofreció un nuevo sistema de apoyo. Infórmese sobre cómo el programa apoyó a Delia como persona y a su familia en su conjunto. Explore cómo la empoderaron para que pudiera criar a sus nietos con confianza.
La historia de Delia
Delia Ramírez: Mi nombre es Delia Ramírez y soy una abuela que cría a sus nietos. [Bebé haciendo gorgoritos] Me vi en mi casa con dos bebés, las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y con problemas.
[Bebé haciendo gorgoritos]
El más grande tenía terribles rabietas y situaciones, y era muy difícil. Me sentía, digamos que, derrotada. No sabía a quién acudir. Recordé Head Start, sin saber lo fabuloso que era el programa. Nunca me imaginé que se iban a ocupar de las niñas, que les iban a enseñar y ayudar a la familia en general. Me dieron la oportunidad de tomar cursos universitarios. Me dieron la oportunidad de contar mi historia, de poder ayudar a otras personas. Me llevaron a Washington para hablar con senadores y congresistas. ¡A mí!
[Risas]
Me siento empoderada ahora, como abuela, como madre y como persona que está atravesando esta crisis de opiáceos. Me siento confiada en que mis nietos serán buenos, por el solo hecho de haber asistido a Head Start.
En esta serie de videos podrá explorar historias de tres familias de Head Start afectadas por el consumo de opioides y otras sustancias. Descubra cómo Head Start brindó apoyo en el proceso de recuperación de estas familias.