Uso de las RBC para promover el bienestar de la familia

Introducción

El bienestar de la familia se produce cuando todos los miembros de la familia están seguros, sanos y tienen oportunidades de progreso educativo y movilidad económica.

Un estado de bienestar ayuda a los niños y a las familias a prosperar. 1 En respuesta, Head Start y Early Head Start han hecho que el apoyo al bienestar de la familia sea una parte clave de su misión. "Bienestar familiar y familias como estudiantes" es una de las competencias del programa basadas en la relación.

Este recurso explora cómo fortalecer el bienestar de las familias y los niños. En este se enumeran los conocimientos y habilidades específicos necesarios cuando nos centramos en el aspecto del bienestar familiar de esta competencia. También encontrará descripciones de prácticas para aplicar dichos conocimientos y habilidades en su trabajo con las familias. Cada sección termina con preguntas reflexivas para apoyar su crecimiento como profesional.

Papel de los profesionales de servicios familiares y los visitadores del hogar

Como profesional de servicios familiares o visitador del hogar, usted desempeña un papel importante en su programa Head Start o Early Head Start. Su trabajo le brinda una única y gran oportunidad para crear relaciones con las familias que sean positivas y estén orientadas a las metas. Estas relaciones pueden apoyar el bienestar de las familias.

Las familias disfrutan de bienestar cuando todos los miembros de la familia están seguros y sanos. Las oportunidades para el avance educativo y la movilidad económica también contribuyen al bienestar de una familia.2 Entre este tipo de necesidades básicas están el acceso a recursos y servicios comunitarios (p. ej., vivienda, programas de nutrición, salud, atención de la salud mental). Si los niños cuentan con estas, son más propensos a mostrar signos de desarrollo positivo en sus habilidades de lenguaje, cognitivas y socioemocionales.3,4

Barreras sistémicas para alcanzar el bienestar

Muchas familias enfrentan barreras para acceder a estos servicios tan necesarios. Por ejemplo, durante la pandemia del COVID-19, muchas familias de raza negra, indígenas e hispanas/latinas y las familias recién llegadas a los Estados Unidos tuvieron menos acceso a una atención de la salud física y mental de calidad y a otros servicios de apoyo familiar en comparación con las familias de raza blanca. Estas desigualdades se debieron en gran medida al racismo y a la discriminación institucionales.

Como explican los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, sigla en inglés): "El COVID-19 ha dejado al descubierto décadas, por no decir siglos, de inequidades que han socavado sistemáticamente la salud física, social, material y emocional de los grupos minoritarios raciales y étnicos".5 Tales inequidades pueden reducir la disponibilidad de servicios para familias con niños pequeños, lo que lleva a la desconfianza en los sistemas de servicios y puede debilitar la participación de la familia. 6, 7

Durante la pandemia, las personas que no son de raza blanca también han experimentado tasas más altas de infección y cuadros graves de la enfermedad, dificultades financieras y problemas de salud mental.8 El estrés causado por la adversidad crónica y el trauma, incluido el trauma histórico, puede afectar negativamente el bienestar de las familias. Además, las experiencias negativas con los sistemas públicos (p. ej., atención de la salud, inmigración, justicia, cuerpos policiales y bienestar infantil) pueden reducir el grado de comodidad y confianza de las familias en aquellos servicios existentes que podrían apoyar su bienestar.9

Competencias basadas en la relación que sirven de guía a los profesionales de servicios familiares y visitadores del hogar

Las competencias basadas en la relación (RBC, sigla en inglés) sirven de guía a los profesionales de servicios familiares y visitadores del hogar en cuanto al conocimiento, las habilidades y las prácticas que necesitan para apoyar la participación de la familia. Las competencias relacionadas con la promoción del "Bienestar familiar y familias como estudiantes" requieren los conocimientos y habilidades que se enumeran a continuación.

Conocimiento sobre el bienestar familiar

Un profesional de servicios familiares o visitador del hogar:

  • Sabe cómo reconocer la resiliencia familiar, las fortalezas y los recursos, los dones y talentos únicos, y lo que las familias ya están haciendo para mantener el bienestar familiar y hacer frente a los desafíos.
  • Entiende que el desarrollo saludable de los niños está relacionado con el bienestar y las metas que tiene la familia para ellas y sus hijos.
  • Conoce los signos de depresión, trauma, consumo de sustancias, falta de vivienda, violencia doméstica, maltrato infantil, inseguridad alimentaria, enfermedad mental y otros desafíos para el bienestar de la familia.
  • Está al tanto de las leyes y regulaciones que apoyan y protegen a las familias y sus hijos.
  • Sabe qué recursos hay en la comunidad para apoyar la seguridad, la salud, la salud mental, la estabilidad financiera, la movilidad económica y el crecimiento educativo de las familias; y les pide información de referencia a otros cuando es necesario.
  • Entiende la importancia de pedir apoyo a su supervisor o a sus colegas en temas que están más allá de sus habilidades y conocimientos profesionales actuales.
  • Sabe qué pasos dar y con quién hablar si la seguridad del niño o de la familia se ve amenazada.
  • Entiende cómo detectar situaciones peligrosas y cómo garantizar su propia seguridad cuando está en la comunidad y trabajando en los hogares de las familias.

Habilidades para apoyar el bienestar de la familia

Un profesional de servicios familiares o visitador del hogar:

  • Aplica a su trabajo con las familias información sobre las fortalezas, talentos, cultura, idiomas, aspiraciones, recursos, desafíos, necesidades y metas de estas.
  • Utiliza un enfoque de apoyo y sin prejuicios cuando habla con las familias sobre temas difíciles o delicados.
  • Reconoce la importancia de tomarse un tiempo para el autocuidado, para el propio bienestar del personal y para el bienestar de los demás, sobre todo cuando están apoyando a familias en crisis.
  • Expresa amabilidad, calidez y compasión cuando las familias se sienten abrumadas por desafíos, traumas o estrés.
  • Busca el apoyo de su supervisor o de sus colegas para poder entablar conversaciones difíciles con las familias de manera satisfactoria.
  • Ofrece información y conecta a las familias con oportunidades comunitarias y culturales que utilizan y aprovechan las fortalezas de las familias y apoyan su seguridad, educación financiera, movilidad económica, crecimiento educativo, salud y otros aspectos de su bienestar.
  • Trabaja con las familias en un proceso colaborativo de establecimiento de metas para determinar sus metas y los recursos disponibles y planificar qué pasos deben dar con el fin de lograr sus metas.
  • Trabaja con las familias para determinar oportunidades de educación, capacitación y empleo para avanzar en su movilidad económica.
  • Habla con las familias sobre los indicadores de relaciones saludables y señala los apoyos sociales relacionados y otros recursos.

Prácticas para apoyar el bienestar de la familia

Los profesionales de servicios familiares y los visitadores del hogar pueden usar las prácticas a continuación para apoyar el bienestar de la familia. Aquí encontrará una descripción de cada práctica seguida de ejemplos de cómo usarla. Todas las prácticas deben partir de actitudes basadas en las fortalezas y prácticas basadas en la relación que respondan a la raza, el origen étnico, el idioma y la cultura de cada familia.